Cultura

El día que la música murió.

“Hace mucho, mucho tiempo, todavía puedo recordar cómo esa música solía hacerme sonreír” dice la famosa canción del cantautor Don McLean, quien, dedicándola a tres fallecidos músicos, consiguió recopilar los múltiples pensamientos que ahora se pasan por mi contaminada cabeza. Hoy destaco uno de ellos: ¿Puede la música hacerte inmortal? O, mejor, ¿puede la música inmortalizar los sentimientos que quiso transmitir al ser creada? Cuando mi padre escucha su canción favorita de Los Beatles veo en él ese brillo de felicidad y nostalgia en su cara. Es algo desconocido para mí lo que esa canción significa para él. Sí, es posible que sepa la historia que se esconde detrás de esa sonrisa que aparece con los primero acordes, pero no los sentimientos exactos. Y es que cada canción produce una sensación distinta para cada persona que, en muchas ocasiones, permanece por mucho tiempo.

Porque quién no ha puesto el volumen al máximo, cerrado los ojos y disfrutado alguna vez con su canción favorita. Ese momento en el que crees que puedes con todo y te olvidas del resto del mundo. Pongamos las cartas sobre la mesa: ¿Qué otra cosa puede conseguir afectar tanto en tan poco tiempo a nuestro estado de ánimo? Personal-mente, y no con mucha experiencia, para ser sinceros, pienso que la música es la única creación que puede hacernos alcanzar punto de éxtasis.

Asimismo, no solo es capaz de llevarnos a lo más alto, sino también a lo más bajo. De provocarnos llantos descontrolados causados por esa balada que nos recuerda a nuestro primer amor o incluso derrumbarnos por el recuerdo inmortalizado en una melodía de alguien que ya no está.

Es cierto que mucha buena música no es solo aquella que tiene un notable trabajo musical a sus espaldas, sino la que consigue hacernos sentir. Y es por eso que música de hace varios años permanece para que la escuchemos. Y eso por eso que existen (y existirán) gran variedad de artistas que deleitan al mundo cada día con maravillosas obras de arte para nuestros oídos.

Porque la música tuvo, tiene y tendrá siempre mucho poder. Y si no lo crees, para un momento, escucha tu canción y dime lo que sientes.